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Las relaciones requieren un cuidado constante. Aunque creen que todo saldrá bien, se trata de crecer, madurar y desarrollarse juntos en la relación, y esto se logra con mucha comunicación, respeto y honestidad. Sí, habrá algunas discusiones, ¡pero las peleas de pareja siempre se pueden resolver!
Pero, ¿sabías que ciertos comportamientos pueden conducir a discusiones o incluso al final de una relación? ¡Deben tener cuidado de no introducir elementos tóxicos en su relación!
5 cosas que pueden arruinar una relación:
Exigencias o humillaciones públicas
Todos cometemos errores y, a veces, necesitamos decirle a la otra persona si dice algo que nos lastima o que creemos que está mal. Sin embargo, hay una gran diferencia entre hacerlo solo, en la privacidad e intimidad de una pareja, y hacerlo de forma explosiva frente a extraños o, peor aún, frente a un ser querido. Daña cosas como la autoestima, la confianza y el amor, provocando ira y miedo. ¿Tienes algo sensible que decirle a tu pareja? Hazlo en privado con amor.
Romper una promesa
Nada es más grave que esto. Si es importante entre amigos y familiares, también lo es entre parejas, porque al fin y al cabo una relación es un compromiso y lo que se dice hay que hacerlo o las cosas no salen bien. Si alguno de vosotros hace una promesa, cúmplala; si creen que no es posible, ¡tienen que hablar! No hagas nada en secreto y no decidas no hacer lo que planeaste. Es la columna vertebral de una relación sólida. Deben actuar de tal manera que el otro pueda confiar ciegamente. Da seguridad a las cosas. Ahora, si rompes una promesa, puedes explicarle a tu pareja lo que pasó y tratar de corregirlo. Es imperdonable que lo hayas vuelto a hacer. Incluso de formas más violentas. Confía en nosotros: es casi imposible recuperar la confianza de alguien, así que no juegues con tu suerte (esto aplica para todo: lealtad, dinero, trabajo… ¡Tener cuidado!)
«Borrar» el pasado
No estamos hablando de una lista de tus ex (aunque si nos preguntas, tu pasado no debería dictar tu futuro siempre y cuando aprendas tus lecciones y las apliques para mejorar tus relaciones con los demás). En este punto, creemos que una pelea que no llega a una conclusión saludable puede ser cosa del pasado porque son felices en el presente. Sólo crea ira y resentimiento. Recuerde otra regla de oro: las discusiones deben ser mutuamente satisfactorias y al menos tratar de comprender las perspectivas de ambas partes. Pensar «se acabó» tendrá un efecto bola de nieve porque no será la única pelea inconclusa, todo irá para arriba hasta que llegue el encuentro. ¡Ten cuidado con éste!
Recordar los errores
Han pasado dos años desde que llegaste tarde a una cita, ¿se acuerda? No, lo siento, eso no es bueno. Tales detalles solo pueden mostrar cuán difícil es perdonar, y es aún más amargo cuando te encuentras con tales detalles. Si realmente hay mucha confusión y tú o tu pareja no pueden olvidarla, aumenta la culpa, lo que no es bueno ni para el individuo ni para la pareja. La fórmula es: Hacer todo para hacerte feliz, tanto en lo personal como en la pareja.
Atacar algo de valor para el oponente
A veces hay debates sobre la fe o el gusto… Pero una cosa es exponer los propios puntos de vista y otra atacar algo sagrado en algún grado. Esto puede variar desde cosas pequeñas como películas o pasatiempos hasta cosas más personales como la fe o las ideologías políticas. En este punto es necesario abrir los ojos y simplemente aceptar que todos somos diferentes. Entre parejas, ambos no tienen por qué ser iguales, incluso ellos pueden aprender mucho de sus diferencias.
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