Despliegue Plegable Contenido
- 10 errores que nunca debes cometer al cocinar patatas. Todo lo que necesita saber en las siguientes líneas de este artículo.
- Error número 1: No tomarse la molestia de elegir entre las diferentes variedades de patatas
- Error número 2: Empeñarse en conservar y cocinar las patatas ya germinadas
- Error número 3: No aclarar las patatas porque son ecológicas.
- Error número 4: Cocinar las patatas en agua caliente o hirviendo.
- Error número 5: Pelar las patatas crudas Para no perder tiempo y ahorrar trabajo, deja de pelar las patatas crudas.
- Error número 6: Pinchar repetidamente las patatas para comprobar su cocción.
- Error número 7: ahogar las patatas en demasiada agua.
- Error número 8: Acostumbrarse a licuar el puré de patatas
- Error número 9: No poner las patatas en remojo antes de cocinarlas
- Error número 10: Tirar el agua de cocción
Las patatas ya sea en forma de puré, gratinado, chips o rellenos, o incluso hinchados, etc., no faltan formas de prepararlos. Con o sin piel, al vapor, al horno, al microondas o a la sartén, la patata… A todos nos encantan. Por eso esta verdura es una invitada habitual en nuestras mesas. Pero eso no significa que hayamos dominado la cocina.
10 errores que nunca debes cometer al cocinar patatas. Todo lo que necesita saber en las siguientes líneas de este artículo.
Error número 1: No tomarse la molestia de elegir entre las diferentes variedades de patatas
¿Sabía que actualmente existen casi 3.000 variedades de patata? Esto explica que este almidón se pueda cocinar de diferentes maneras. Cada variedad difiere en textura, forma y contenido de almidón. Pero no olvide que, para cada receta, hay que saber elegir la patata ideal para que el plato tenga más éxito. Bintje, por ejemplo, es siempre recomendable si se quieren preparar patatas fritas crujientes. También puedes elegir entre el Agria y el Rate. Las patatas Charlotte o Roseval, o incluso las patatas firmes, son excelentes para cocinar al vapor. Grenaille y Samba son los mejores para las recetas de horno. Y para nuestro famoso puré de patatas, no hay mejor opción que las Russets o las Yukon Gold. Lo que hay que evitar por encima de todo es el uso de patatas rojas.
Error número 2: Empeñarse en conservar y cocinar las patatas ya germinadas
Cuando las patatas están brotando, es mejor no comerlas. Su alto contenido en solanina suele ser la causa de los problemas intestinales. Sin embargo, se pueden reciclar de diferentes maneras. Si sus patatas están empezando a brotar y todavía están firmes, simplemente corte las zonas dañadas. Cava un poco y estas patatas siguen siendo comestibles. Para evitar que las hortalizas broten rápidamente, recuerda guardarlas en un lugar fresco y alejado de la luz.
Error número 3: No aclarar las patatas porque son ecológicas.
No importa si sus patatas son orgánicas o no, siempre deben ser enjuagadas. Debe saber que las patatas se encuentran entre los alimentos más tratados (pesticidas, fertilizantes químicos, etc.). Por lo tanto, el aclarado es la única forma de eliminar los llamados productos fitosanitarios y los restos de tierra. En el caso de las patatas ecológicas, se puede dejar la cáscara para conservar el ácido clorogénico que contiene la piel. Se sabe que es un antioxidante.
Error número 4: Cocinar las patatas en agua caliente o hirviendo.
Este es uno de los mayores errores que todos cometemos. Sin embargo, esta forma de hacer las cosas no es en absoluto recomendable porque las patatas no se cocinarán de forma uniforme. El exterior se cocinará muy rápidamente mientras el interior permanece duro y crudo. Además, es mucho más probable que la carne se deshaga y, por lo tanto, se sostenga peor. Lo mejor es ponerlos en agua fría y llevarlos a ebullición. Esto asegurará que se cocinen uniformemente. Dependiendo de su tamaño, deberían tardar entre 10 y 20 minutos en cocinarse.
Error número 5: Pelar las patatas crudas Para no perder tiempo y ahorrar trabajo, deja de pelar las patatas crudas.
Es más fácil hacerlos una vez cocidos ya que la piel se desprende sola. Mejor aún, haz un corte a lo largo de la patata y luego en el centro con la punta del cuchillo. De esta manera, después de la cocción, sólo hay que quitar la piel.
Error número 6: Pinchar repetidamente las patatas para comprobar su cocción.
Demasiado, como se dice, nunca es bueno. Si se pinchan las patatas con demasiada frecuencia, la pulpa puede volverse acuosa y harinosa. Sólo hay que atenerse al tiempo de cocción. Para una patata pequeña, no es necesario sacar el cuchillo antes de los 10 minutos de cocción. Cuente con 15 a 20 minutos para una patata mediana y grande. Si es necesario, puede prolongar el tiempo de cocción 5 minutos más.
Error número 7: ahogar las patatas en demasiada agua.
Cocinar con demasiada agua hará que la patata pierda sus cualidades nutricionales. Por ello, prefiera cocinar al vapor o limitar el agua de cocción.
Error número 8: Acostumbrarse a licuar el puré de patatas
Evite licuar el puré de patatas para no extraer todo el almidón, ya que de lo contrario se volverá blando y viscoso. Y por lo tanto desagradable para la boca. Por eso es aconsejable utilizar un molinillo de alimentos para obtener una textura más ligera.
Error número 9: No poner las patatas en remojo antes de cocinarlas
Excepto en el caso de la cocción al vapor, este paso es crucial para otros tipos de cocción para eliminar parte del almidón de las patatas. El objetivo es que no se peguen. Para que las patatas fritas queden crujientes, también puedes sumergirlas en agua helada y luego limpiarlas bien con un paño limpio.
Error número 10: Tirar el agua de cocción
No tires el agua de cocción de las patatas. ¿Sabías que todavía se puede reciclar? Gracias a su alto contenido en almidón, puede utilizarse como limpiador doméstico (por ejemplo, para limpiar los azulejos) o para desbrozar y limpiar el jardín.
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